Kevin Andrés Duque es ‘El Paisita de Oriente’ y el pasado 14 de agosto obtuvo el máximo título de Rey Nacional Infantil de la Trova. En esta entrevista habla de cómo llegó al mundo de la trova, de su vida y sus propósitos.
Uno de los principales recuerdos que tiene Kevin Andrés Duque de su relación con la trova es ese en que, al haber tenido trabas para ingresar a la guardería por su corta edad, decidió trovar para la profesora unos versos que la convencieran de que era oportuno recibirlo.
«A mi profesora Dora
yo la quiero saludar
y que a la guardería
por favor me deje entrar».
Tiene 11 años y dice que aproximadamente desde los tres recuerda que jugaba a crear rimas. Vive con sus abuelos Hernán y Rosalba quienes asumieron su crianza cuando cumplió dos meses. Fue junto a su abuela que surgió la pasión por las rimas, pues ella también disfrutaba de hacer «versitos», los cuales grababa y enviaba a la Radio Sutatenza, donde se emitían.
Kevin es un niño vivaz que habla sin miedo y con un marcado acento paisa. Nació en Marinilla y ha vivido allí siempre. Al conversar con él prevalece la sensación de estar hablando con una persona que, a pesar de su corta edad, comprende muchas de las cosas que pasan en el mundo. Habló de cómo llegó al mundo de la trova, de su cotidianidad y de sus sueños.
¿Cómo es tu rutina de entrenamiento?
«Nos ponen diferentes modalidades de trabajo como la sencilla, el tema impuesto y todo eso. También nos dan teoría porque el tema del canto no lo trabajamos tanto. El entrenamiento va más en escribir y poner atención, porque importa más la técnica».
El día que ganaste dijiste en la entrevista que no había aspectos difíciles de la trova, ¿si es así?
«La verdad, no hay modalidad dura. Lo que pasa es que yo digo que uno tiene días pa trovar. Hay días en los que yo trovo bien y hay días en lo que trovo mal. Todo depende de cómo me sienta. Por ejemplo, el día que gané me sentía muy bien. Como el evento fue en el Parque Norte, fui mucho antes para poder montar en juegos y estaba feliz por eso. Estaba con mi papá y mi hermana como desde las 11:00 a.m. entonces me sentía relajado».
¿Cómo resuelves cuando estás con un rival y te quedas sin ideas?
«Hay algo que se llama campos semánticos, que nos enseña el profesor que pueden ser Dios, amor, trova, realidad del país. Y por cada uno de esos temas, uno puede hacer una trova. Algo que tenga que ver con Dios, por ejemplo, ‘gracias a Dios estoy acá’ o ‘gracias al amor a la trova estoy aquí’. Y todo así tiene que ver con los campos semánticos. Entonces cuando estoy trovando pienso en eso y casi nunca me quedo sin ideas.
¿De dónde te surgen las ideas para trovar?
«A mí, hay cosas que me inspiran. Me gustan los videojuegos y de ahí muchas veces saco cosas. También me gusta ir a la finca, jugar, tengo una moto que me dio mi papá entonces allá a veces me distraigo. Además, el profe Neruda nos da muy buenas técnicas y tengo un libro que se llama «Diccionario de rimas», que de ahí saco rimas y hago tareas de ir estudiando los finales de las trovas, que se llaman ‘encabalgamiento’. También nos ponen algo de rima y el buscar palabras relacionadas con ellas. Porque un trovador no debería decir siempre la misma palabra, sino algo parecido, pero que suene más bonito».
¿Cómo te va en la escuela?
«A mí me va bien y aprovecho para decirle a la profe de Español que muchas gracias porque me dijo que por ser Rey Nacional ya había pasado la materia. En Matemáticas ahora estoy dando una clase de trova, porque la profe de nosotros es muy bella, que lo deja expresarse a uno. Tengo un amiguito que se llama Samuel y le dicen ‘El ninja’ y también le gusta trovar. En la clase hay algunos muy animados y a otros no les gusta tanto, pero ven la trova bien cuando les hablan de los premios. Pero entonces yo les digo que si les gusta la trova por el arte está bien, pero que si es por la plata que ni sueñen que van a llegar a ningún lado porque el que hace algo solo por eso no le sale bien».
¿Qué quieres hacer más adelante? ¿Con qué sueñas?
«Yo no sé, porque yo siempre pienso como la Barbie, que puedo ser lo que quiero ser. Una vez quiero ser una cosa y otra vez otra. Entonces a veces soy un piloto, a veces soy un ingeniero, a veces soy muchas cosas. Por el momento estoy centrado en ser trovador, ojalá mantener el título en la Feria de las Flores y seguir conquistando nuevos festivales».
